Después de la telefonía móvil o celular, el nuevo reto en el campo de la telefonía es la videotelefonía, del que ya se pueden ver algunas muestras en ferias y certámenes en este campo, o algunas aplicaciones de uso aún restringido como las videoconferencias.

Uno de los aspectos a cuidar durante el establecimiento de la comunicación videotelefónica es la movilidad de los interlocutores. Al igual que en la telefonía de voz, la tecnología ha evolucionado para conseguir que los interlocutores no deban permanecer en cierto lugar o cierta posición para realizar la comunicación, pudiendo moverse libremente. En este sentido, la videotelefonía debe incorporar a las cámaras de vídeo un sistema de seguimiento activo del interlocutor que permita que éste permanezca en el centro del campo visual de las cámara y así facilitar la comunicación.

El objetivo principal de este proyecto, es el estudio y desarrollo de técnicas de detección y seguimiento de caras, junto métodos de estimación de movimiento y seguimiento activo mediante imágenes cartesianas y log-polar en cámaras de bajo coste para el desarrollo de un sistema orientado a aplicaciones en videotelefonía, con el fin de tener permanentemente centrado en el área de atención de la imagen a los interlocutores y que la información visual sea representada de forma eficiente con el objetivo de optimizar el volumen de datos en las comunicaciones.